Viñedos
Sobre el año 1505 de la mano de los conquistadores y colonizadores de la isla de La Palma llegaron las primeras cepas de viñed. La variada procedencia de éstos y de los posteriores colonizadores ha dado lugar a una riqueza varietal inigualable a otras zonas. Una privilegiada situación geográfica, un clima atlántico con influencia de los vientos alisios, desde los 200 hasta los 1.400 metros sobre el nivel del mar,
Siendo la Isla de La Palma una escala casi obligada en las principales rutas comerciales de aquellos años atrás, favoreciendo un comercio de vinos, convirtiéndolo en una de las principales fuentes de riqueza del Archipiélago.
Sin embargo sobre el año 1848 aparece una decadencia de los vinos Canarios. A mediados de los años cincuenta del siglo pasado comienza el cultivo de la platanera en las zonas costeras de la isla, lo que propicia el abandono mucha viña.
El cultivo de la vid en estas zonas es en parrales “bajos” (poco usuales en la actualidad) y en forma de vaso bajo. Sus suelos muy evolucionados y fértiles suelen ser de de tierra vegetal sin capa de arena. Con abalancamientos en los lugares de pendientes muy pronunciadas mediante taludes o paredes de piedra seca.
Actualmente hablamos de una Denominación de Origen asentada y que exporta mucho de su producción.